Indicadores de TDAH en niñas y mujeres

Las niñas con TDAH suelen tener el tipo primariamente inatento de esta condición, lo que puede hacerlas parecer tranquilas y soñadoras, y a veces puede pasar desapercibido. Incluso los padres que han tenido mucha experiencia en el manejo de la condición en sus hijos pueden pasar por alto los síntomas sutiles que indican que su hija es probable que también tenga TDAH. Dado que los síntomas del TDAH no se manifiestan tan pronto en las niñas como en los niños, esto aumenta los malentendidos y los diagnósticos erróneos en las niñas. Como resultado, se cree que el TDAH está infradiagnosticado en ellas hoy en día y es mucho más común de lo que se pensaba. Hay que tener presente algunas señales de advertencia a las que hay que prestar atención y que, si se actúa, podrían facilitar la vida de las niñas en esta situación, 

Es importante alertar de que si el TDAH existe en una familia, especialmente si un niño varón ya ha sido diagnosticado, los padres deben ser conscientes de que en las niñas se presentará de una manera mucho más sutil y comenzará a causar problemas más tarde de lo que lo hizo en el niño varón ya diagnosticado. No hay que engañarse pensando que sus efectos serán mucho menos perjudiciales para las niñas a medida que avanzan hacia la edad adulta por estas características. Se cree que el TDAH de tipo inatento es más debilitante, especialmente si no se diagnostica ni se trata.

o   tienden a ser soñadoras, incluso ansiosas

o   pueden garabatear mucho en clase cuando el profesor está hablando, etc.

o   son incapaces de prestar total atención a lo que se dice (escuela, casa, amigos)

o   suelen carecer de confianza en sí mismas/autoestima

o   tienden a ser perfeccionistas

o   pueden necesitar mucho más tiempo para terminar los deberes por este motivo

o   tienden a tener relaciones dramáticas/intensas

o   son propensas a ser demasiado emocionales y a tener rabietas, especialmente en casa

o   tienden a volverse malhumoradas e irritables durante la adolescencia

o   tienen dificultades con las relaciones (amigos, grupos, profesores, etc.)

 Estas niñas pueden ser muy ordenadas en la forma en que registran sus tareas y organizan sus notas y deberes de clase. Esto puede ser engañoso para los padres que han experimentado las mochilas y los deberes desorganizados de sus hijos con TDAH, que necesitaban ser supervisados constantemente para asegurarse de que las cosas no se perdían, etc. ¡Que esto no les engañe! Las niñas suelen ser mucho más ordenadas y organizadas en esta etapa de sus vidas, pero esto no es evidencia de que no tengan TDAH. Los síntomas del TDAH en las niñas son de naturaleza diferente a los de los niños, pero sin embargo son igual de debilitantes a largo plazo.

Si las niñas tienen algún problema de aprendizaje, como dislexia, dispraxia o discalculia, por lo general se identifican estas condiciones y se ofrecen las adaptaciones adecuadas. Algunas chicas con TDAH no tratado sufren también ansiedad y/o depresión en la adolescencia, lo que es más fácil de detectar y tratar. Sin embargo, si no se reconoce y se trata el TDAH subyacente, es poco probable que los tratamientos para las condiciones coexistentes alivien los síntomas, por lo que la niña sigue sufriendo debido a los síntomas del TDAH no tratado, que se agravan con el inicio de la pubertad. Estas niñas corren el peligro real de abandonar los estudios (studies, not school) en cuanto se les permita, incluso las que son muy inteligentes y creativas. Esta es la razón por la que vemos que muchas mujeres inteligentes vuelven a estudiar más tarde, cuando han aprendido a manejar el estrés y los desequilibrios hormonales de la adolescencia se han asentado.